24 julio 2012

La Crisis del capitalismo, Argentina y el Modelo


La Crisis del capitalismo, Argentina y el Modelo



Por Conrado Yasenza*

La crisis del capitalismo mundial sin dudas impactará este año en nuestra economía y con más fiereza que la crisis 2008/2009 generada por la hipotecas subprime. Da cuenta de ello la situación de estancamiento de los Estados Unidos de Norteamérica, la pavorosa realidad que vive la zona Euro, con situaciones realmente angustiantes para los pueblos de Grecia y España (de Inglaterra no se habla mucho pero la realidad económica del reino es inquietante y la veremos en poco tiempo más); China ya no es el motor de tracción del crecimiento como lo fue hasta antes de este primer semestre y Brasil inició su desaceleración económica que se agrava por las políticas restrictivas de gasto sustentadas en el temor a lo que los economistas neodesarrollistas llaman rebrote inflacionario, medidas que enfrían la economía del tropical hermano. Como consecuencia de este panorama se pueden avizorar algunas consecuencias: caída de las exportaciones de nuestros productos primarios y con valor agregado, complicaciones en las terminales de autopartes - a pesar de que el gobierno de Dilma Rousef dio, la semana pasada, algunas señales positivas sobre este problema de la industria automotriz -, y la posibilidad que esto conlleva en la afectación de puestos de trabajo. 

El Gobierno Nacional ha implementado una serie de planes macro-económicos que de aplicarse y desarrollarse bien, serán importantísimas medidas contracíclicas. Uno de ellos es el programa de construcción de viviendas Pro.Cre.Ar que insumirá mano de obra, creará empleo y motorizará la economía por tratarse de una de la ramas más dinámicas de la economía y que pone en funcionamiento una gran gama de áreas del trabajo y la producción. Hay que decir que al finalizar esta semana se asignó la primer tanda de créditos a los beneficiarios que poseen tierras para la construcción de sus viviendas, y hay que decir también que este es el primer paso y - perdón, amigos economistas, por la osadía - quizás el más sencillo de implementar dentro de su complejidad; habrá que ver como se desarrolla la viabilidad de créditos para aquellos que no poseen terreno y que dependerán del otorgamiento de terrenos en posesión del Estado. Otra de las importantes medidas es el plan de créditos a la inversión productiva que obliga a los bancos a prestar un 5% de sus depósitos para la ampliación de inmuebles, compra de insumos y bienes de capital a la pymes. Esta es una gran medida que posibilitó la Reforma de la Carta Orgánica del Banco Central pero también aquí habrá que ver si la correalción de fuerzas hace posible que los bancos cumplan con la obligación de prestar para reactivar la producción y no para seguir ganando grandes cantidades de dinero en base a préstamos al consumo y la financiación de tarjetas de crédito a tasas de interés usurarias. 

La medida macro y contracíclica está planteada y es obligación: veremos cómo se desarrolla esta batalla que es económica pero también cultural. La decisión de, luego de la estatización del 51% de la acciones de YPF, reinvertir utilidades en investigación y producción es también una de las decisiones económicas importantes del Gobierno Nacional. Como contrapartida, el Gobierno deberá revisar el modelo en algunos ejes centrales y productores de inequidades como lo son el trabajo informal y el trabajo precario, sobre todo si se presta atención a los pronósticos reconocidos por fuentes del Gobierno, acerca de las prioridades que se fijaron para el primer semestre, paritarias y conservación del poder adquisitivo del trabajador - afectado seriamente por la inflación, que es inflación por trabajo, consumo y producción pero inflación al fin, sobre todo si no ocultamos esa costumbre de los comerciantes locales de remarcar todo lo que puedan ante el aumento de haberes obtenido por los gremios y para los trabajadores, y si el Gobierno reconoce que es un tema que ligado al desprestigio del INDEC, no puede soslayarse -, y para las que se están fijando para el segundo semestre: la defensa del empleo y el combate contra la pérdida de un solo puesto de trabajo. El problema para el Gobierno y el modelo es que en estos últimos dos años de crecimiento la creación de empleo no fue un estandarte a blandir. Una frase que alguna vez pronunció el Ministro de Educación, Alberto Sileoni, y que sirve para graficar la destrucción del Estado en los últimos 35 años, es contundente: Destruir el sistema educativo es fácil y rápido, reconstruirlo es costoso y lleva muchos años y trabajo ( No es textual, sí el espíritu de la frase). 

Recomponer un Estado que ha sido arrasado con virulencia desde la implantación de las políticas liberales de apertura indiscriminada al mercado con la dictadura cívico-militar del 76-83 primero, y con las políticas neoconservadoras de salvaje capitalismo diseñadas en una línea cíclica de continuismo destructor durante la segunda década infame conducida por el menemato, no es una tarea sencilla y requerirá mucho más que nueve años de políticas económicas sustentadas en el trabajo, el mercado interno y la producción. Hará falta la institucionalidad de este modelo nacional y popular que debe estar sujeto a modificaciones, ya que ningún modelo es eterno e inmodificable como tampoco no pasible de contradicciones, y que oriente al país, conducido por Gobiernos populares, a empeñarse en un esfuerzo refundador del Estado que comprometa a todos los sectores sociales y productivos, aunque para lograrlo haya que dar pelea diaria y sin descanso contra aquellos agoreros del desastre, es decir, contra aquellos que hacen de su profundo deseo de ver a las mayorías populares sumidas en la angustia y la depresión por falta de horizontes de vida, una causa nacional en el peor sentido de la expresión de un modelo de país.


*Periodista. Dtor de la Revista de Cultura y Política La Tecl@ Eñe www.lateclaene.blogspot.com

No hay comentarios.: