14 marzo 2013

El Memorándum de Entendimiento y una luz de esperanza.


El Memorándum de Entendimiento y una luz de esperanza.


Por Conrado Yasenza*


La discusión que la oposición mediático-política ha establecido en ambas Cámaras Legislativas en torno al Memorándum de Entendimiento con Irán, no está a la altura del debate que debiera darse acerca de un tema muy sensible para la sociedad argentina. Hemos comprobado la falta de información y seriedad en la expresiones verbales y gestuales del senador Ernesto Sanz cuando se refirió a las declaraciones del vocero del canciller de Irán, Ramin Mehmanparast, quien, según Sanz, advirtió que ningún funcionario sería interrogado, declaraciones que el canciller Héctor Timerman refutó aclarando que fue el propio canciller iraní, Ali-Akbar Salehi, quien desmintió esa versión a través de un comunicado oficial
Informarse sobre las complejidades del Memorándum de Entendimiento con Irán, para quienes no nos dedicamos con especificidad al análisis del campo de la política internacional,  es comprender que el intento de diálogo con Irán busca procurar justicia sobre la voladura de la AMIA, y no aumentar el flujo comercial con ese país o cualquier otro interés espurio como una y otra vez repiten los editorialistas de los medios históricamente dominantes y sus voceros de la oposición política anclada a los titulares mediáticos. Es advertir que el país con el que se negocia tiene una densidad político-religiosa poco accesible para nuestro modelo de sociedad. Irán es un Estado teocrático y su estructura política depende en definitiva de las decisiones del Ayatollah Ali Khamenei, situación ésta que torna aún más complicada la negociación.  Entiendo que el peor de los escenarios posibles sería que los iraníes imputados por la voladura de la AMIA no se presentaran a la indagatoria (derecho que los asiste) que realizará el Juez Canicoba Corral en Teherán y conforme al derecho procesal argentino. Si esto ocurriese se habría perdido esa pequeña oportunidad de indagar y tratar de hacer justicia, pero esto nunca implicaría un retroceso en la causa porque la causa está parada, frenada, hace seis años. Y quizás, Argentina quedaría diplomáticamente en la posición de haber intentado una negociación que contenía la indagatoria para tratar de impartir justicia, e Irán como el país que se sigue negando a ello.
Por otro lado, son varias las organizaciones de familiares de las víctimas que están de acuerdo con hacer el intento, quizás única vía actual para establecer responsabilidades, culpabilidades, y para obtener justicia. Las mismas organizaciones se han manifestado abiertamente en contra de la mendaz utilización política del Memorándum por parte de la oposición política y mediática, que ya a esta altura conforman una unidad orgánica.
Y una cuestión final: Es discutible el rol de la DAIA y su presidente Julio Schlosser. Son discutibles también sus intereses políticos (sabemos que su conducción está integrada por una alianza extraña entre ortodoxos y reformistas, como el rabino Bergman - por lo menos en las formalidades). Dentro de ese marco de entorpecimiento de una negociación que implica una pequeña esperanza de justicia, son conocidas las afinidades ideológicas de la conducción actual de la AMIA con el ala dura del Estado de Israel. Si no se negocia no se hace nada, si se negocia, peor, es porque se está haciendo una utilización geopolítica del tema, o el Gobierno ha cambiado de posición en materia de política internacional guiado por intereses comerciales. Lo concreto, y con el mayor de los respetos, es que la DAIA siempre ha tenido un papel discutible en nuestro país. El periodista Mario Wainfeld lo expresó claramente: No hicieron demasiado por proteger a los miembros de la colectividad judía argentina secuestrados y desaparecidos durante la última dictadura cívico-militar debido a que Israel tenía una posición de no condena hacia el accionar militar argentino. Y luego, ya en democracia, tuvieron un presidente que está procesado por encubrimiento en la causa AMIA, Rubén Beraja, que además fue el titular del banco Mayo, banco que quebró y por cuya quiebra también está procesado.
Y en la actualidad, asistimos a los vaivenes de su presidente Julio Schlosser que hasta acusó al gobierno de promover un tercer atentado en el país. Un dislate y un peligroso acto de irresponsabilidad política y social.
Comprender que el Memorándum de Entendimiento con Irán constituye una luz de esperanza, quizás mínima pero esperanza al fin, en la búsqueda de Justicia y condena para los autores de tamaño crimen vivido por toda nuestra sociedad, implica dejar de lado mezquinos fines electoralistas y acercarse a las posiciones mayoritarias de las organizaciones de familiares de las víctimas que desde hace diecinueve años luchan por la memoria de sus seres queridos y porque sus muertes no queden impunes.
Ese es el fin de esta posibilidad diplomática que el Gobierno Nacional, en una apuesta audaz y en un momento especial en el que analiza todas sus acciones pensando en el bien común de nuestra sociedad, busca concretar siguiendo el camino de Verdad-Memoria y Justicia.

Periodista. Dtor. de la Revista Digital La Tecl@ Eñe www.lateclaene.blogspot.com

Lo criminal anida en el "escrache" a Axel Kicillof Por Conrado Yasenza. /Tiempo Argentino

http://tiempo.infonews.com/2013/02/19/editorial-96769-lo-criminal-anida-en-el-escrache-a-axel-kicillof.php

Tiempo Argentino


19.02.2013 | violenta intolerancia

Lo criminal anida en el "escrache" a Axel Kicillof

 Por Conrado Yasenza. 

La oposición mediática y política está generando un clima en el que los límites para la convivencia democrática están siendo derribados, y esto ya es muy preocupante. Este enrarecimiento de la atmósfera política y social viene desarrollándose desde los agresivos cacerolazos del 13 de septiembre y el 8 de noviembre de 2012, en donde la violencia fue "in crescendo" hasta llegar a la agresión física a periodistas. Pero también puede rastrearse en el ataque a "huevazos" del que fuera víctima, en 2008, Agustín Rossi. 



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07 febrero 2013

Los Heraldos Negros en la Ciudad Amarilla (Represión en Parque Centenario) Por Conrado Yasenza


Los Heraldos Negros en la Ciudad Amarilla

Por Conrado Yasenza*

Julieta Egul, cronista de la TV pública, recibió el martes 29 de Enero por la noche, dos impactos de bala de goma en su abdomen cuando realizaba su trabajo en las cercanías del Parque Centenario. Otros trabajadores de prensa fueron brutalmente reprimidos por el accionar violento de la Policía Metropolitana, creación y responsabilidad del Jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Mauricio Macri.

La ola de violencia represiva accionada desde el Poder Estatal de la Ciudad comenzó el lunes 28 por la noche cuando fueron cercados y reprimidos vecinos, asambleístas de Parque Centenario, feriantes y personas en situación de calle y extrema vulnerabilidad.

La violencia ejercida por Macri y sus Metropolitanos (muchos de civil, sin identificación alguna) es la expresión cabal de una concepción ideológica mercantilista que considera los espacios públicos como propios, ajenos a los deseos y necesidades de los ciudadanos, de sus pueblos, y es bajo esa misma lógica de mercado que en estos espacios pueden gestarse negocios beneficiosos para el Poder de la Ciudad y sus amigos.

Pero la cuestión de fondo, y vinculada a esa lógica mercantilista e individualista, es la absoluta falta de sensibilidad social que exhibe con fiereza el Gobierno de la Ciudad. Los conflictos sociales obtienen como respuesta palos y balas de goma. Allí la torva desnudez de los funcionarios que cubren sus lomos de lobo con falsas pieles de cordero. Y esa lógica de negocios, violencia, racismo y abandono es la marca de fuego que porta Macri desde su ingreso al campo político (y desde antes también)

Es preciso también decir que el conflicto de Parque Centenario es complejo por la cantidad y diversidad de problemáticas e intereses que allí se desarrollan: Feriantes, vecinos, asambleístas del Parque, feriantes agrupados en una suerte de Cooperativa que se entiende con todos los Gobiernos ( hoy se identifican con toldos amarillos) y personas en situación de extrema vulnerabilidad, de indefensión absoluta, que acuden allí para intentar el descanso de un vida hostil, y que son considerados por Macro y su equipo como detritos sociales, residuos de una Ciudad en la que triunfan los que deben triunfar mientras que para aquellos que no lo logran solo cabe la desidia, el abandono, las rejas, las balas y el garrote. Eso sí es inseguridad; eso sí es violencia porque la violencia siempre es de arriba hacia abajo, siempre es del poderoso hacia el indefenso, siempre es desde la riqueza y el egoísmo hacia la pobreza y el abandono.

Y es preciso también destacar que esta brutal represión se lleva a cabo a días de la conmemoración del 16 aniversario del asesinato de José Luis Cabezas, lo cual indica una línea de continuidad ideológica subsidiaria y continuadora de la segunda década infame sufrida por la República. Estos son los verdaderos rostros de la derecha racista y neoliberal que se maquilla con discursos republicanistas y con apelaciones sensibleras e impostadas dictadas por Durán Barba o alguna otra consultora de imagen (D. Barba: el mismo que le enseña a Macri cómo destruir a sus enemigos)

Por todo ello, repudio con todo mi ser el accionar represivo y violento que la Policía Metropolitana - repito: creación y responsabilidad de Macri -, desplegó sobre nuestros compatriotas en estas dos nefastas noches de Parque Centenario, y sobre todos los seres que vienen sufriendo desde su asunción todo tipo de atropellos y violencias. Y hago responsable de la cobarde represión al Jefe de Gobierno de la Ciudad y a los funcionarios de su Gabinete a quienes les quepan las responsabilidades del caso.

¿Serán estos los heraldos negros que la muerte envía como señales a los habitantes de la Ciudad de Buenos Aires?


* Periodista. Dtor. de la Revista La Tecl@ Eñe www.lateclaene.blogspot.com

Miembro de COMUNA.

16 enero 2013

Pequeña Carta a los Cofrades, Compañeros/as y a el alma sensible de la neutralidad.


Pequeña Carta a los Cofrades, Compañeros/as y a el alma sensible de la neutralidad.

A los cofrades, a los compañeros y compañeras de buena fe, y a aquellos que todavía por pereza intelectual o por la saturación y obnubilación que implica el bombardeo mediático cotidiano se niegan a ver la realidad, va dirigida esta pequeña misiva. Seamos claros y no nos perdamos en los fondos del bosque natural de Darín: 
1) La República vive una crisis institucional grave generada por un poder del Estado, el Judicial, que a través de su máxima expresión, la Corte Suprema de Justicia, con excepción del Juez Raúl Zaffaroni, ha decidido no ejercer su poder y su responsabilidad para ordenar el desquicio jurídico que genera la convalidación del Orden Cautelar instalado por las corporaciones económico-judiciales-mediáticas. Ejemplos destacados: Suspensión durante ya cuatros años de la Ley de Servicios de Medios de Comunicación Audiovisual, con el show peristáltico de cautelares y Cámaras correspondientes, y la Cautelar ofrecida a la Sociedad Rural como prenda de lealtad y sumisión a la propiedad privada y la corrupción del poderoso, del que tiene y ejerce el poder. 
2) Ante todo mis respetos a las víctimas y familiares que padecieron la muerte, el sufrimiento y el horror en la Ex-ESMA, pero pongamos en perspectiva lo que acontece: Se montó, sobre el supuesto asado-brindis, una miserable y canalla operación de prensa desde la usinas del Grupo cómplice de la última dictadura cívico-militar, a la que se sumó lo peor del arco opositor - y hasta personajes deleznables como Cecilia Pando - oposición que ha bloqueado históricamente la prosecución de los Juicios de Lesa Humanidad. Y esto es lo importante, lo sustancial: Lo que molesta no es el Ministro de Justicia Julio César Alak ni el asado ni el brindis; lo que irrita, exaspera, encoleriza a la reacción política y económica de la Anti- República es que como nunca en la historia del país y en todo el territorio de la Nación, se están llevando a cabo los Juicios de Lesa Humanidad, y con condenas ejemplares a cumplirse en cárceles comunes. Últimos y notables ejemplos: Juicios en Bahía Blanca y Circuito Camps. Esto es lo central, lo que no debe perderse de vista tras el humo jurídico y las operaciones de prensa que padecemos a diario. Sumo un hecho que agrava la situación: La Corte Suprema de Justicia, en la cabeza visible de su máxima autoridad, el Presidente Ricardo Lorenzetti, ha decidido alinearse con los poderes fácticos que atentan contra el Orden Constitucional y Democrático expresado en un Gobierno Legítimo y elegido y validado por la voluntad popular.
3) La oposición política de derecha y de izquierda no demuestra ni tiene ningún interés por representar la voluntad popular; no presenta ninguna aspiración programática porque todas sus expectativas están depositadas en la caída del Gobierno Nacional. Su apuesta es al desgaste, a la horadación diaria y sistémica del Gobierno, y por ello la ausencia de propuestas políticas programáticas: Sólo esperan el derrumbe, para el que trabajan a diario junto a las corporaciones económico-mediáticas, para una vez consumado el hecho, recibir instrucciones de los mismos poderes fácticos, esto es, aguardan la presentación del programa económico y político que deben aplicar. Ya lo hemos vivido y sufrido. No podemos ser tan frágiles de memoria en cuestiones tan esenciales como las que intento abordar. 
Por eso, queridos compañeros/as, cofrades y neutrales de alma sensible, es necesario recordar una vez más, y como lo ha demostrado la historia de los pueblos, que cuando el hacha del verdugo, brazo extensivo del poder real, cae sobre las cabezas de miles de voluntades populares, la tragedia ha sido consumada y ya entonces el lamento será en vano.

Conrado Yasenza - Periodista. Revista La Tecl@ Eñe www.lateclaene.blogspot.com 

@conradoyasenza en Twitter


La Ley de Medios y la batalla por la hegemonía del poder


La Ley de Medios y la batalla por la hegemonía del poder

Por Conrado Yasenza*

1. Minimización de la Ley de Medios

Suenan corceles y clarines en estos tiempos de batalla cultural. En los meses previos a lo que se ha denominado como el 7D (por el 7 de Diciembre), es decir, el día en que vence el plazo, según el fallo de la Corte Suprema de la Nación, para que las empresas de medios de comunicación audiovisuales presenten ante la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (Afsca) sus propuestas de adecuación a La Ley de Medios, el cuestionamiento acerca de la importancia de esta fecha y sus implicancias con relación al cumplimiento o no de la Ley por las empresas de medios, en especial por el Grupo Económico-Empresarial Clarín, ha cobrado un vigor no exento de singularidades dentro del campo nacional y popular, y en particular, en algunos medios afines al Gobierno. Se ha minimizado la importancia política que contiene en sí la disputa por el respeto y el cumplimiento de una Ley democrática, que recogió los 21 puntos planteados por la Coalición por una Radiodifusión Democrática, y que luego fuera discutida durante un año en cientos de foros institucionales, comunales, cooperativos, hasta llegar a la sanción de la Ley por ambas Cámaras del Congreso de La Nación, y aprobada finalmente por amplias mayorías.

2. La Madre de Todas las Batallas

La discusión en torno a la ley de Medios es una batalla política, sin dudas. Y es una batalla política porque es una fuerte compulsa por el poder. La batalla política está presentada de este modo: O el poder está en manos de las corporaciones económico-comunicacionales que sólo buscan la máxima ganancia corporativa e individual, o el poder lo ejerce el Estado y en favor de la ciudadanía, el pueblo, y con el fin de democratizar la comunicación y dinamizar las posibilidades de que entren en escena nuevas voces que pluralicen la circulación de los bienes culturales y sociales. En estos términos está concebida la batalla por la Ley de Medios, que entendida así es la Madre de todas la batallas – frase que acuñó ya hace tiempo atrás el hoy Vicegobernador de la Provincia de Buenos Aires, Gabriel Mariotto. Pensemos en los tres años de demora en la aplicación de La Ley como producto de una cautelar interpuesta inicialmente ante el Juez Carbone – quien le dio curso - por El Grupo Clarín para frenar el artículo 161 de adecuación (o desinversión, o desconcentración, términos que no gustan demasiado en ningún sector político y económico) para dimensionar el poder fáctico de este Grupo Empresario. Hay posiciones que desestiman este argumento contraponiendo la idea de que en realidad la Ley se halla vigente con excepción del Art 161, y sólo para el caso Clarín. Pero, vamos, sabemos que ese es uno de los artículos medulares del conflicto, y por ello mismo la magnitud de la disputa sostenida con beligerancia por el Grupo.

También sabemos ya que el artículo 161 obliga al gigante de posición dominante a desprenderse de gran parte de sus 250 licencias para quedarse con 24, según lo dispone la Ley. 

Desglosemos un poco para aportar claridad sobre las licencias:

Una persona de existencia visible o ideal podrá ser titular o tener participación en sociedades titulares de licencias de servicios de radiodifusión con estos límites:

- Sólo una licencia de servicios de comunicación audiovisual sobre soporte satelital (Por ejemplo, DirecTV). Esto ya excluye a la misma persona de tener cualquier otro tipo de licencia de servicios de comunicación audiovisual.
- A nivel local, podrá tener sólo una AM, dos FM, una señal de cable o un canal de televisión; no pudiendo tener ambos. (No se pueden tener más de tres licencias de todo tipo a nivel local).
- Quien maneje un canal de televisión abierta no podrá ser dueño de una empresa de distribución de TV por cable en la misma localidad, y viceversa.
A nivel nacional, una persona podrá tener hasta 10 radios o canales de televisión abierta.
- Una misma persona podrá tener hasta 24 señales de cable por suscripción distribuidas en todo el país.
- Las licencias se otorgarán por un período de diez (10) años.

3. Querellas por el capital simbólico

Si poseer 250 licencias del espectro comunicacional no supone una posición dominante, y si esa posición dominante no se traduce en poder real, fáctico, esencial para la construcción de sentido común y para la disputa por el capital simbólico, no estamos comprendiendo bien aquello de que la querella por el capital simbólico es una lucha por el poder que se da tanto en procesos culturales como económicos, y simultáneamente. Pierre Bourdieu aporta lucidez sobre estos procesos que se dan en campos donde se establecen relaciones de poder según el capital simbólico acumulado: “Para analizar la dinámica social es necesario comprender el campo (lo social hecho cosa -lo objetivo) como el lugar en el cual se juegan las posiciones relativas que ocupan los distintos grupos o clases y las relaciones que entre los mismos se establecen y, al mismo tiempo, comprender las formas de conformación de la subjetividad, es decir, la constitución del habitus (lo social inscripto en el cuerpo - lo subjetivo) Una primera aproximación a este concepto nos permite definirlo como un conjunto de disposiciones duraderas que determinan nuestra forma de actuar, sentir o pensar” … “Hay una amplia diversidad de campos y subcampos que funcionan con una lógica específica pero que a su vez comparten un conjunto de leyes generales, válidas para todos. Cada campo específico se define a partir del capital que en él está en juego. El capital puede definirse como un conjunto de bienes acumulados que se producen, se distribuyen, se consumen, se invierten, se pierden” Podríamos entonces decir que el poder simbólico es un poder de construcción de la realidad que busca instaurar un orden de conocimiento, un orden gnoseológico: el sentido inmediato del mundo, y en particular del mundo social. Los símbolos son el instrumento por antonomasia de la integración social; tomados como elementos de comunicación y conocimiento hacen posible el consenso sobre el mundo social y, a su vez, la reproducción del orden social. Y esto es lo que está en juego, nada más ni nada menos, con la aplicación de la Ley de Medios de Comunicación Audiovisual: La ruptura de ese consenso social que reproduce un orden social establecido e internalizado en el habitus, en la subjetividad, desde hace por lo menos más cincuenta años. Esto supone un nuevo paradigma comunicacional que a su vez enfrentará desafíos en su concreción - y esto es lo que transforma sustancialmente el panorama a futuro ya que abre un nuevo universo de posibilidades, que pueden incluso ser defectuosas en un principio, pero desafiantes y perfectibles- ; pero el elemento disruptivo está planteado y es la Ley de Medios como espinel de la batalla cultural por la construcción de un nuevo sentido simbólico, social y económico que es el complemento de un nuevo paradigma político en donde el Estado tiene un rol activo en la redistribución de los consumos culturales y de lo bienes económicos, definidos a través de políticas activas de inclusión, participación y redistribución. Y es por ello que el 7D no es una cuestión menor sino una importante instancia política de correlaciones de fuerza y poder entre un estado democrático, soberano políticamente y económicamente independiente, y entre un Grupo Económico-Financiero-Comunicacional como lo es el Grupo Clarín, que, y por impericia ética y pereza intelectual – además de una oprobiosa actitud de sumisión- de los sectores políticos enfrentados con el Gobierno, se ha transformado en el real Partido de la Oposición al Gobierno Nacional. Grupo que hasta ahora cotiza en la bolsa de valores de Nueva York. He ahí el verdadero rostro del Grupo Clarín: Su Poder Económico con el que ha presionado, condicionado y derribado gobiernos elegidos democráticamente. Allí está el discurso del expresidente Raúl Alfonsín en la Sociedad Rural – hace ya tiempo, socios junto a La Nación y Clarín en Expoagro. Y también la ya tan mentada frase del torvo radical César Jaroslavsky: Clarín ataca como partido político y se defiende con la libertad de expresión.

4- Los Medios y el contexto Suramericano

La disputa de poder entablada aquí por el Grupo Clarín contra el Gobierno no es una exclusividad de la Argentina. El episodio más reciente es el operativo combinado entre encuestadoras y medios de comunicación que se realizó durante la campaña electoral en Venezuela, y aun hacia el final del escrutinio. Los falsos sondeos daban como resultado un empate técnico, y los medios de comunicación fueron los encargados de tratar de instalar esta idea. De llegar al final del comicio con un empate técnico, éste habilitaría la vía de la impugnación por fraude. Todo estaba preparado: la prensa y televisión local, la CNN, y… Clarín y TN-Canal 13, con su periodista insignia-estrella, Jorge Lanata, quien protagonizaría luego uno de los papelones periodísticos de la jornada al anunciar que según datos de boca de urna – prohibidos en Venezuela – ganaba Hernán Capriles. Anecdótico.

Pero lo importante es cómo todo el dispositivo comunicacional de lo que solemos denominar “la derecha” dispuso todas sus baterías periodísticas, y en una suerte de “Internacional del Periodismo Hegemónico de Derecha”, para tratar de horadar la imagen de Hugo Chávez e instalar a Capriles. Como dije antes: durante la campaña y antes de finalizar los comicios. Y allí también estuvieron, como laderos del Grupo Clarín – que apostó por Capriles como maniobra anterior para lo que consideraban la operación de perforación y desgaste final de la Presidente Cristina Fernández de Kirchner – la “Brigada Internacional del Desánimo” conformada por el Pro y el Peronismo Residual.

Sobran ejemplos de este poder económico-financiero-comunicacional operando políticamente para reinstalar la restauración conservadora en la región: El intento de asimilar durante las elecciones y como acción de desprestigio, a Ollanta Humala con Hugo Chávez. La denostación permanente de los Presidentes Evo Morales y Rafael Correa, y la participación en los intentos de Golpe de Estado en Bolivia y Ecuador. La acción contundente y efectiva en la preparación, días antes y con la acusación mediática por la masacre de campesinos en la localidad de Curugua-ty, del Golpe Institucional a Fernando Lugo en Paraguay. Y claro, la participación en el Golpe realizado contra Chávez en 2002, en donde los golpistas tomaron la televisión oficial de Venezuela para que el pueblo no se enterase de lo que estaba aconteciendo (recomendable es ver el documental La Revolución no será televisada, se encuentra en You Tube).

En Argentina la fase es de desgaste cotidiano: Cacerolazos, Harvard, Georgtown, Gendarmes y Prefectos sublevados inicialmente por un reclamo salarial que se transformó en una suerte de rebelión a la que se sumaron policías y hasta Marinos; embargo de la Fragata Libertad en Ghana, embargo ocasionado por una decisión de su capitán de amarrar en puerto ghanés por “razones operativas y técnicas” nunca aclaradas; regreso de los marinos que fue presentado por el Grupo Clarín como una segundo operativo de “desmalvinización”; el bochorno del Consejo de la Magistratura y los jueces jubilados subrogantes, y finalmente, supuestos reclamos salariales en la Marina y el cacerolazo que se está organizando para el 8 de Noviembre próximo. Claro, todos estos episodios descontextualizados, editados maliciosamente, capturados por las islas de montaje y edición, y fogoneados desde el Multimedios y sus satélites. Ejemplos más que evidentes de que la batalla cultural, dentro de la cual se halla contenida y como Batalla Mayor, la Ley de Medios, es una batalla política por la hegemonía del poder.

5. 10 D

Qué ocurrirá el 10 de Diciembre, luego de vencido el plazo para la adecuación, es un inquietante interrogante. Los artilugios, tanto legales como no, a los que puede apelar el Grupo Clarín para no desconcentrar, son múltiples y tratar de enumerarlos supone correr el riesgo de caer en teorías conspirativas o paranoides. La apuesta es fuerte. 

De ambos lados. Pero el Gobierno sabe que de no ganar esta batalla puede perder todo su capital simbólico y de poder acumulado hasta el momento. Y por ello lo importante del 7D y de la definitiva y legítima aplicación de La Ley de Medios de Comunicación Audiovisual. Por lo cual es algo incomprensible la minimización de este hecho dentro del campo periodístico, que supone que a la sociedad no le interesa el tema ya que “la politización” no ha llegado a esas costas. Mares turbios y de fondo se mueven también en el campo del periodismo y sus análisis. La batalla por la Ley de Medios es crucial ya que, y en tanto batalla por el poder, supone que de salir victorioso el Gobierno, el camino para la profundización del modelo nacional y popular, de distribución de bienes culturales e ingresos, quedará algo allanado. Y además, y este no es un dato menor, saldrá fortalecida la democracia que costó tanto esfuerzo y dolor para su construcción. Nada está dicho aun, el partido está en sus minutos decisorios, y las acechanzas, y a 35 años de Democracia, siguen merodeando como el cazador que espera pacientemente a su presa. Habrá que revitalizar las defensas, y el triunfo de la Ley por sobre las corporaciones económico-financieras, será esencial para esas defensas que pugnan por enriquecer nuestra democracia.

* Periodista. Editor de La Tecl@ Eñe – Revista Digital de Cultura y Política

Los Sres. del Caos y el incendio de la calle y la Democracia.


Los Sres. del Caos y el incendio de la calle y la Democracia.*


(Escrito urgente entre la angustia, el dolor y la bronca)

Por Conrado Yasenza*

Hay mucha gente muy ansiosa por tomar el poder a como de lugar. Nadie, luego de los saqueos durante el alfonsinismo y después de haber vivido los trágicos episodios del 2001, puede ser ingenuo y pensar que los saqueos que ocurren desde el 20 de Diciembre son espontáneos. Hay dirigentes de camioneros en fotos que evidencian su participación en la gestación de la llamarada en Campana, como también de Barrios de Pie y de algunos punteros del pejotismo de derecha. No hay espontaneidad en esto: El 19 de Diciembre el paro no fue lo que el arco político-sindical esperaba, pero resuenan las palabras de Micheli: "Guerra nuclear al Gobierno". Y entonces comenzaron a caer las bombas de Carilino, Baldomero Álvarez y su Juan Domingo, el Momo Venegas, Barrinuevo y su revuelto de trotyl; todos apostando al incendio del país cuando la realidad del país les da la espalda, como lo demostró el ¿acto? (misse en escene)del 19 de Diciembre. Hay desocupación o sub-ocupación, sí. Hay inflación, sí; hay cierto nivel de retracción en la producción, también. Pero se sigue apostando a la producción, hay paritarias, existe un Estado presente y activo en pos de proponer y gestar políticas en beneficio de los más humildes. Un estado propositivo que trabaja para el conjunto y no para los intereses individuales de sectores políticos y sindicales que desean otro modelo de país vinculado al ajuste, la desocupación, la reprivatización y las pingües ganancias que éstas le dejaría a los privatizadores y a sus cómplices sindicales. ¿Espontáneo?: González, afiliado a Camioneros, vinculado en los hechos de Campana; Villalba, ligado a Micheli, tratando de sabotear las líneas de electricidad en Neuquén y finalmente incendiado él mismo. Entonces, qué quieren que creamos luego de todo lo vivido y sufrido. Estos trágicos bufones rematan la muerte de los 36 asesinados durante el 19 y 20 de Diciembre de 2001 y convocan a un paro en esa fecha; operan políticamente todo el tiempo y desde todos los flancos, incluidos los sets televisivos. Ahí está también Julio Bárbaro, el reclutante de detenidos políticos durante la dictadura cívico-militar para la causa presidencial de Massera, todos los días en TV y Radio, y como Bartolomé Mitre hijo, diciendo que el Gobierno no es legítimo, que hay un clima de caos institucional, de desintegración de la Republica. Moyano usando la inflación y la inseguridad en el cierre del fallido paro-marcha y lanzando su proclama presidencial. La Solano Lima de Ritondo colgando funcionarios en sus carteles leds. Y siempre nuestra paleo-izquierda dando no en el centro sino en la periferia del análisis político, realizando un centro al vacío o un vacío sin centro desde las viejas condiciones objetivas para hacer la revolución que nunca hacen ( el poder no es su vocación).

La preparación del clima de caos, del incendio de las calles, de el país sitiado, se viene fogoneando desde hace meses, y creo, sí, muy subjetivamente, esperando Diciembre, días sensibles para todos, y aun más para quienes sufren todavía la no inclusión y el trabajo informal. ¿El caos propalado estalla de golpe el 20 de Diciembre? Retiro sumido en un clima de tensión, cuando miles de viajantes se preparan para encontrarse con su familiares o simplemente descansar, es una casualidad? Retóricas del discurso de la espontaneidad cuando los colectivos y los coches con patentes de otras localidades fueron llegando desde temprano a diferentes zonas del conurbano tratando de copar supermercados para robar electrodomésticos, y luego el fósforo que enciendió la mecha y estaciones de servicio en llamas, y minimercados chinos saqueados tratando de retrotaernos a la imagen de aquel comerciante coreano o chino - no lo recuerdo bien ahora, su nacionalidad, si su rostro de espanto y dolor - desolado y llorando. Y nos dicen que se debe a que el país se parece a la sociedad del 2001. El que es ingenuo políticamente, y en la vida, a cierta altura de los acontecimientos históricos es un negador, o lisa y llanamente, un cretino. El nivel de organización queda claro desde el inicio. No soportan este modelo que enjuicia a genocidas, que nacionaliza YPF, que recuperó para las Jubilaciones par los jubilados y no para los especuladores, que reforma la Carta Orgánica del Banco Central y obliga a los bancos a prestar un 5% de sus ganancias y destinando ese préstamo para la producción, que abre el Mercado de Valores a pequeños ahorristas, que investiga los negociados de las cajas de las obras sociales sindicales, que sanciona a las cementeras que cartelizan el sector, que fragmenta licitaciones de la obra pública para que las transnacionales y las multinacionales no se devoren las licitaciones; que sostiene la AUH, la Asignación por embarazo, que trata, y a pesar de la crisis mundial, sostener la productividad y no la timba financiera. No toleran ser parte de un país socialmente justo, políticamente soberano y económicamente independiente. Sus malos augurios de pitonisas miopes sufrieron el fallo del Tribunal del Mar de Hamburgo y la Fragata Libertad volverá a casa el 9 de Enero. Pero también se pagó el cupón PBI por 3.502 millones de dólares afirmando así la política de desendeudamiento llevada adelante como uno de los pilares de este modelo, y ello a pesar del Juez Griessa y su fallo desautorizado por la Cámara de Apelaciones de Nueva York.

Los dirigentes como Moyano o Plaini haciendo conferencias de prensa desde la CGT Anti-K deslindado a los gritos la responsabilidad de sus afiliados en la organización de los saqueos (Campana) y desafiando con irascibilidad al Gobierno Nacional, argumentado una victimización del gobierno para eludir corresponsabilidades. La Rural en sintonía con el clima de instalación de la idea del desgobierno, llamando a un ¿paro? El Radicalismo en la voz del diputado Ricardo Gil Lavedra, quien pertenece al partido que, a través del ex presidente Fernando de la Rúa, decretó el Estado de Sitio en todo el Territorio Nacional para garantizar la cacería y matanza de pueblo, atacando también al Gobierno. Quieren espiralizar la psicósis del caos violando la memoria y la muerte de nuestros muertos de diciembre de 2001. Están cada vez más solos y sin otro recurso que la generación de la violencia, aprovechándose todavía de nuestros hermanos que sufren aun la pobreza. Son hienas, sanguijuelas que se adhieren a la piel del que sufre, picándolo, succionando su sangre y desesperándolo. Basta, comprendan fascistas: Por ahora han sido vencidos, y el proyecto nacional, popular y reparador cuenta con el aval del pueblo. Sus conspiraciones son las peores, de la más baja estopa, de la que usa al pobre, al que padece, y luego se ríen del sufriente, mostrando sus filosos y perversos dientes. Hagan política, entiendan que llevamos 30 años de democracia, propongan programas políticos compartidos y ganen elecciones. Pero Sres. Fascistas (y si alguno salta por lo de fascismo, que no es usado alegremente a lo lilita, lean al gran poeta Roque Dalton) Con la Violencia No. No lo vamos a tolerar más, el pueblo trabajador y militante, no lo va a tolerar más.

*Publicado en El Ortiba http://www.elortiba.org/notapas1475.html

Dtor. de la Revista Digital La Tecl@ Eñe – Cultura y Política  www.lateclaene.blogspot.com


13 noviembre 2012

El Diktat de Versalles y la derecha argentina


El Diktat de Versalles y la derecha argentina

Por Conrado Yasenza


La derecha extrema argentina y sus adherentes de clase alta y media-alta sufren del síndrome del Diktat de Versalles: Con el pacto de Versalles se le prohíbe a los alemanes la posibilidad de la conformación del ejército, de formar un ejército que de órdenes entre los alemanes; el ejército como una cuestión de fe para los alemanes, un elemento constitu
tivo de identidad, un aglutinante de identidades culturales y sociales. Contra el Diktat de Versalles, contra la palabra Versalles, es que surge el nacionalsocialismo de Hitler (como si venciendo este término y la prohibición, se derrotara a Luis XIV y Napoléon juntos). La derecha extrema argentina, la de Biondini, Pando, Videla, desea volver a la época en que en la Argentina el Ejército era el que ordenaba la vida y la muerte; dictaba órdenes marciales a la sociedad y la regulaba mediante el terror físico y económico, y en favor de los grandes Grupos Económicos. No planteo una mirada paranoide sobre el resurgimiento con visibilidad y toma de las calles de la derecha extrema argentina. Sólo planteo que estos datos, como las palabras de Videla, que buscan y tienen una escucha, deben ser atendidos aunque más no sea como leve amenaza. Debemos también tener oídos hacia esa presunción de retorno, de enrarecimiento del clima social, del humor social. No digo aquí que el humor social haya virado hacia la aceptación de una derecha racista y violenta, aun en sus versiones más morigeradas; sólo presento una inquietud hacia la irrupción visible de esa derecha que parecía derrotada pero que se ha hecho visible en los dos cacerolazos, con pancartas propias, violentas y fascistas, pero con cierta apropiación y reproducción de las mismas por parte de un sector de las capas altas, medias altas y medias-medias. La complicidad civil permite que cobre vigor ese lema del nacionalsocialismo alemán: La derrota que ha de volverse victoria. La parte más antigua y profunda de estas derechas fascistas y militaristas (el bosque profundo), con su importante simbología identitaria y unificadora en la idea del Ejército Nacional y sus valores, se ha hecho visible nuevamente. Es deseable que aquellos que marcharon el 8N, si realmente creen en la República y la Democracia, al ver a esta expresión extrema tomando la calle junto a ellos, se haga algunas preguntas vitales para evitar ese deslizamiento hacia ese temible lugar, cercano o muy próximo a la bronca o el odio, o las actitudes violentas que tal vez, sí, todavía, encuentren su motivación en el histórico rechazo visceral hacia el Peronismo y lo qué él representa en tanto ampliación de derechos e inclusión de los más desprotegidos. Preguntas que sirvan, y a tiempo, para evitar esa aceptación que pueda traducirse, nuevamente, en complicidad con las fuerzas más oscuras y criminales que aun caminan entre nosotros




Aquellas viejas teorías sobre la manipulación


Aquellas viejas teorías sobre la manipulación

Por Conrado Yasenza

Compañeros periodistas y no: A revisar las teorías. Refutamos a fines de los ochentas, y al calor de otras nuevas teorías, a los cientistas sociales que elaboraron sus formulaciones teóricas e investigaciones sobre el poder manipulador de los medios de comunicación. Ya acontecidos el 13 S y esencialmente el 8N, vemos hoy la profunda identificación de los manifestantes caceroleros con los tópicos esgrimidos por, por ejemplo, Jorge Lanata, y desde las usinas de Clarín y TN. Identificación que, en un contexto de potente confrontación de los medios masivos - Grupos Económicos- con el Gobierno Nacional, refuerza el nexo entre tópicos y manipulación. Los medios disponen, amplifican y reiteran su batería de ideas fuerza hacia los sectores sociales que, deseantes de ese escaso pero necesario alimento argumentativo, luego, y sin que medie proceso crítico alguno de apropiación y re-elaboración, repiten quizás hasta en un proceso de orden inconsciente. Entonces, y para volver a aquellas teorías que refutaron a las de los años 60 y 70, ¿En dónde podemos observar esa decodificación del mensaje por parte del receptor que lo hace suyo en un interesante proceso de resignificación? ¿Dónde percibimos la re-elaboración de esos mensaje propalados hasta el hartazgo por los medios masivos? Aquellas ideas centrales de Mc Luhan, "Somos lo que vemos" y "Formamos nuestras herramientas y luego éstas nos forman", nos siguen interpelando con relación a la máscara de la mediatización en donde mensaje y medio funcionan como una unidad que provoca profundas modificaciones en las culturas y sociedades. Y no quiero abundar en un determinismo tecnológico, pero creo que deberíamos volver a revisar y estudiar el profundo poder que poseen los grandes medios tecnológicos, que han desarrollado el Cable e Internet (no existían cuando Mc Luhan dijo aquello de que vivíamos en la Aldea Global), para influir en la producción de sentido común o en la opinión pública; para pensar si no sigue vigente la idea mediática de lograr que seamos lo que vemos y escuchamos; para detenernos en la reconsideración del poder que estas herramientas que formamos o desarrollamos a su vez nos forman. Pudimos ver, para volver a Cynthia García y su micrófono abierto en el centro de la manifestación cacerolera, la repetición de esos tropos mediáticos sin reformulación alguna ( aunque Sarlo diga que los manifestantes piensan estos temas antes de concurrir a las marchas del teflón): " 678 Rocho", "Riesgo país", "Miedo a la Presidenta", " No hay seguridad Jurídica"; "El mandato de Clarín dura 24 horas"; "Vivimos en una dictadura"; " A Hitler lo votaron las mayorías" ( esta es la más fuerte porque allí anida el huevo de la serpiente); otras de estigmatización y racismo: "Con nuestros impuestos se bancan a los vagos"; "Con el dinero de los jubilados se financia la AUH y los Planes". ¿Hay allí reflexión crítica, reformulación, re-elaboración, apropiación para la decodificación del mensaje? O es sólo la enunciación sin tamiz del soma diario que El Gran Hermano, que se halla en todos lados y en todos lo bares, vierte amablemente en las retinas y oídos del sujeto deseante de ese alimento que lo confirme en su identificación, en su condición de clase y en su pretensión arrogante de ser el núcleo mismo de la sociedad toda.


06 noviembre 2012

Algunas ideas sobre el clima destituyente/Por Conrado Yasenza


Algunas ideas sobre el clima destituyente


Por Conrado Yasenza*




En las últimas semanas hemos asistido a distintos episodios sociales y políticos que, sin caer en teorías conspirativas o paranoides, dan lugar a establecer que todos ellos poseen una relación de causalidad con la instalación de un clima de desgaste – destituyente, diría Nicolás Casullo – sobre el Gobierno Nacional, que es dable atender.

1- Amplificación y sobre-exposición de episodios de inseguridad (reales, existentes, aquí y en el resto del mundo) a través de los grandes medios de comunicación, en particular y por la potencia del relato a través de la imagen, de las señales televisivas y de cable – en este caso generando el efecto de una perversa cinta de Moebius, y digo perversa porque es muy dañino para el individuo y para el tejido social, amanecer, levantarse, enfrentar la tareas diarias laborales que implican la salida a la calle, notificándose o anoticiándose de robos a domicilios (con o sin sus habitantes), asesinatos, cortes y protestas. Esto no supone ningún grado de información precisa y clara, sino un ensañamiento cruel con el ser que debe salir y que por efecto de estas transmiciones, lo hace sometido al temor que ese afuera representa. He ahí la función del miedo: Generar la desconfianza entre ciudadanos – el otro es un sospechoso, un enemigo-, además de la idea de que el caos reina en la ciudad de la furia.

2- Sin desconocer que el aumento de precios es visible, constatable, y que la inflación es un tema que el Gobierno debe revisar, puede advertirse también en estos temas la intención de crear un cuadro de situación en el cual la inflación se presenta como ya en su fase de espiralización, con recesión y sin producción, lo cual es falso. Ligado a este dato, la idea de que esta situación económica se debe a las políticas económicas implementadas desde el Gobierno Nacional, basadas en una apuesta fuerte al gasto público y la redistribución del ingreso, políticas que acentuarían – según la ortodoxia y sus voceros - el clima inflacionario y recesivo. Distinto es el tema del aumento de precios: Allí el Gobierno Nacional no es quien forma la cadena de valores de precios, sino los grande Supermercados e Hipermercados que hasta le imponen, para exhibir en góndola los productos, los precios de compra a los productores con plazos de pagos excesivamente laxos. Quizás el Gobierno debería comenzar a exigir estructuras de costos a las empresas y a las cadenas de híper y supermercados para contar con datos precisos y así elaborar un cuadro de análisis de precios reales y en consecuencia realizar acciones específicas sobre esta cuestión.

¿Cómo se observa aquí la hilación con el clima destituyente? Bien, los sectores económicos fácticos están intentando, desde hace tiempo, regresar a políticas ortodoxas de ajuste y devaluación, mediante las cuales volverían a contar con pingües ganancias sin la necesidad de invertir ni producir, abriéndose al capital financiero trasnacional y con las ya vividas consecuencias dramáticas sobre el conjunto de la población. Digamos: reinstalar lo que se ha definido ya como Capitalismo Financiero. Dejemos aquí, y para otro análisis, la estructura de fuerte concentración de la economía nacional.

3 – La articulación de manifestaciones caceroleras, para nada espontáneas y convocadas desde una fuerte organización en las redes sociales, aglutinadas en base a los temas que se han descripto, más el concepto instalado de “cepo cambiario” y trabas para salir del país, ideas-fuerza propaladas por el multimedios en el mismo sentido de esa infinita cadena de repetición acuciante – se prepara un cacerolazo para el 8 de Noviembre, casi un mes antes del 7 del Diciembre, fecha en la que los grupos empresarios de comunicación, especialmente Clarín, deben ya haber presentado sus propuestas de adecuación a la Ley de Medios de Servicio Audiovisuales, ley votada por el Congreso Nacional y frenada, para Clarín y por una cautelar, en su art. 161 – con los caceroleros que se manifestaron en Georgetown, movilizados por operadores económicos representantes de los fondos buitres, junto a la planificación de un cuestionario basado en la mismas consignas sobre libertad de prensa, inflación e inseguridad con las que un Grupo de Operadores Políticos liderados por el ex funcionario en el área de Educación de Pro, el hoy joven estudiante en Harvard Juan Ignacio Maquieyra, recibieron a la Presidenta en esa Casa de Estudios. Así entonces, el clima de caos institucional, falta de libertad de prensa e inseguridades varias, trascendió las fronteras del país y la región sudamericana.

4 - La explosión de las protestas de Gendarmes y Prefectos generadas por la implementación de un decreto inspirado en la idea de que los rangos sub-alternos e inferiores de la fuerza no percibieran una diferencia abismal en sus salarios con la oficialidad, decreto que tendía a ordenar los escalafones salariales, y que debido a una liquidación de sueldos a la inversa, redujo los ingresos de los rangos inferiores, produjeron el malestar, el reclamo, la protesta, la ruptura de las cadenas de mando, y nuevamente la idea de caos, y en este caso con implicancias muy sensibles para nuestra sociedad que vivió en 1987 y 1988 dos alzamientos o motines militares. ¿Dónde aparece aquí la idea destituyente? Quienes tuvieron a su cargo la liquidación de sueldos, teniendo en cuenta las especificaciones del decreto dictado por el Ejecutivo, fueron la misma gendarmería y prefectura, liquidación que se realizó en forma desastrosa y que motivó el reclamo que luego pasó a tomar otro cariz, ya con el paso de los días. Allí nuevamente las cámaras de televisión y los micrófonos de las radios de los medios dominantes apabullaron a la sociedad con la instalación de, otra vez, el imperio del caos, al cual se sumó el malestar de las fuerzas de seguridad con el Gobierno Nacional (recordemos que confluyeron en la protesta sectores de la Policía Federal, de la Policía de la Provincia de Buenos Aires y hasta la Armada) Hubo, entones, descabezamiento de las cúpulas de Gendarmería y Prefectura, responsables del conflicto, y pases a disponibilidad de voceros que en soledad insistían en un reclamo por salarios ya resuelto, y que ahora se sumarán a una posible concentración-paro de la CGT disidente de Hugo Moyano. Imposible olvidar la reaparición en la pantalla de TV, como para fogonear aquel viejo temor a los motines, de Aldo Rico en el programa de Samuel “Chiche” Gelblung.

5 – Finalmente el caso de la Fragata Libertad, retenida en Ghana por una decisión inconsulta y arbitraria del Capitán de la Fragata, Alberto Mario Blanco, quien notificó mediante nota al Ministerio de Defensa, el repentino cambio de puerto y destino “por razones operativas y técnicas”, de Nigeria a Ghana, sabiendo que en ese puerto la fragata podría ser retenida por acción de los Fondos Buitres, como ocurrió, y teniendo en cuenta también que durante la gestión de Nilda Garré al frente del Ministerio de Defensa, se dictaron estrictas normas para que la Fragata evitara puertos en los cuales la situación actual pudiera suceder, y limitando sus viajes a la región y el Caribe. Como denunció Horacio Vertbisky en su nota en Página 12, esto denota una creciente autonomización de la Fuerzas durante la gestión de Arturo Puricelli al frente del Ministerio de Defensa. Y aquí, nuevamente, ¿dónde se puede hallar esa intención destituyente? Bien, la profundización de las políticas de Derechos Humanos, la subordinación de las Fuerzas a éstas, y los juicios contra delitos de Lesa Humanidad perpetrados por integrantes de la última dictara cívico-militar, pueden ser un factor de malestar dentro de las fuerzas, por lo menos de la oficialidad con más antigüedad. Insisto, no es ser paranoide o conspirativo, pero apelando – y creo que vale – a la severa y sumaria historia antipopular de la Marina en particular, puede pensarse en una operación de desgaste de la imagen del Gobierno Nacional y de la Presidente en particular. Muchos son los beneficios, más allá del malestar político generado por las políticas de derechos humanos, que los marinos sienten perder con las limitaciones que fueron dictadas por la ex ministra de Defensa, Nilda Garré. Y nuevamente, renuncias: En esta oportunidad el Jefe de la Marina, Carlos Alberto Paz, y rumores de reclamos salariales en el arma.

Todo este panorama, apenas esbozado, nos permite pensar en operaciones políticas y económicas que se encuentran centradas en su fase de instalación de un continuo clima adverso y de desgaste hacia el Gobierno Nacional. El bochornoso bloqueo de la designación de Jueces naturales de la Constitución en el Consejo de la magistratura, protagonizado por sectores políticos del radicalismo, como Oscar Aguad, miembro del Consejo y que avaló con su firma el concurso que ahora impugna, y por sectores de la corporación judicial, reaccionarios a la democracia y al Gobierno Nacional, cuyas figuras que destacan en este escándalo institucional, son el consejero y camarista civil Ricardo Recondo (otra vez el doble standartd: Consejero y Juez) y el representante de la Federación Argentina de Colegios de Abogados (FACA), Daniel Ostroposky, nos proporcionan elementos de análisis para sostener que las intenciones destituyentes hacia el Gobierno Nacional, elegido hace menos de un año, son serias y para tener en cuenta.

*Periodista. Dtor. de La Tecl@ Eñe – Revista Digital de Cultura y Política www.lateclaene.blogspot.com


02 octubre 2012

Y que me digan Talibán!

Y que me digan Talibán!

Por Conrado Yasenza


Y que me digan Talibán! Ya no comprendo a ciertos periodistas de la intelligentzia progresista argentina. ¿No entienden la compleja situación que afronta el Gobierno Nacional, y por carácter transitivo, el país todo?. Trabajan en redacciones, están muy informados, tienen acceso a fuentes de primer nivel político; tienen conversaciones y diálogo con otros periodistas tan informados como ellos. Ento
nces, me pregunto: ¿Siguen sin observar que la derecha y el Partido de Oposición más poderoso, El Grupo Económico Clarín, no ceja desde el 2008 en su intención destituyente, en la posibilidad de talar de raíz el proceso de transformación político, social y económico iniciado en 2003? Incluso, ¿no están al tanto de los deseos transformados en acciones, en hechos, de intentar violentar la costosa construcción colectiva democrática? ¿Tan intrascendente les parece lo ocurrido en Paraguay, tan mínimo y lejano consideran ese Golpe Institucional asestado al Gobierno Democrático y Popular de Fernando Lugo?. Insisten con la condescendencia, la amabilidad, las estrategias para recapturar a ese electorado voluble y caprichoso, políticamente ignorante, que hace gala, y hasta el elogio, de esa ignorancia; cómplices de este clima de violencia que enrarece nuestros días. Algunos compañeros periodistas minimizaron los cecerolazos y caceroleros; para quedarse tranquilos, y casi con sapiencia matemática, dividieron entre claros odiantes e indecisos rescatables, aunque esos indecisos no se hayan preguntado nunca por qué fueron a esa marcha, y más aun, que hicieron y qué se preguntaron luego de haber estado allí? Pero llegó lo peor: el afiche criminal contra Moreno. ¿Cómo desconocer, entonces, que aquellos que vienen tratando de quebrar institucionalmente al país desde el 2008, han recalado en el lenguaje criminal que se inspira en el odio y el terror? Caen las máscaras y los ropajes: Ese es el rostro de la derecha, y de vastos sectores de las capas medias que acompañan a esa derecha. Es el rostro del fascismo, y el fascismo es criminal, queridos compañeros periodistas del campo progresista. El fascismo no valora sus buenas intenciones de burgueses gentiles hombres. El fascismo arrasa con la vida, y con las buenas intenciones de los seres liberales y progresistas, de los bien pensantes periodistas, respetados y de gran experiencia. De todos modos, un leve giro le han dado a sus escritos en estos días. Hoy sumo nuevas enemistades, lo sé. Pero no son tiempos para medir mesuras y condescendencias. El clima es feo, muy feo, criminal y violento. Hoy, en Página 12, Mempo Giardinelli, quien no es precisamente un orgánico del Kirchnerismo, escribió: (Fragmento) ... "la lucha ideológica devino también económica, es presumible la tentación de que se rompan los principios de la democracia. El golpismo destituyente, como lo prueba la historia de nuestro país, puede llegar incluso a estimular formas de violencia. Ojalá me equivoque, pero podríamos estar en vísperas de días sombríos". Hace unos días escribí, en soledad y a contrapelo, dos notas luego de los cacerolazos. Fui criticado hasta por apelar a la continuidad de matrices políticas y culturales que tienen plena vigencia, aunque los proceso históricos no sean lineales. Luego de leer esas palabras de Giardinelli, me siento menos solo. El Fascismo no descansa: trabaja todo el tiempo para encontrar la raja, la grieta, por donde filtrarse y dar el golpe (del modo que sea o puedan). Y entonces, ya será tarde. Y leeremos con angustia y bronca aquel pequeño pero potente poema de Roque Dalton sobre los fascismos y los fascistas


Pagni, el examen de laboratorio y el nazismo

Pagni, el examen de laboratorio y el nazismo
Por Conrado Yasenza*



El periodista del diario La Nación, Carlos Pagni, sostiene en su nota "Un experimento negativo" que la disertación de la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner, en la Cátedra Argentina en la Universidad de Georgetown, fue un examen en el que debió seducir y justificarse al mismo tiempo. ¿Cuándo? Al abrirse la ronda de preguntas. Es decir, Pagni hace una clara alusión a esa suerte de examen para poner de manifiesto, según su opinión, el déficit - que conduce a la Presidenta al nerviosismo y la excitación desbordante - que nuestra mandataria demuestra para enfrentar conferencias de prensa. Pero continuemos, ¿A qué tipo de examen se refiere Pagni? No a uno académico, sino a un examen político. ¿Yquiénes son los examinadores? Nos informa entonces: Los examinadores fueron los asistentes a esas clases, quienes al preguntar no buscan - en palabras de Pagni - que les den una lección sino certificar o corregir hipótesis que los mismos se han formado acerca de la Presidenta de la República. He aquí un primer inconveniente: ¿Cómo elaboran esas hipótesis los asistentes a las clases? ¿En base a qué informaciones? Podríamos arriesgar nuestra hipótesis, y para ello nos referiremos a las declaraciones del corresponsal en Buenos Aires para la cadena de noticias ABC News, Joe Goldman, quien en una entrevista realizada por Roberto Caballero y Marcos Cittadini en Radio Nacional, señaló que "los medios de las agencias (en Estados Unidos) leen Clarín y La Nación. Con Clarín la amargura llega y uno tiene que lidiar con eso". Es decir, las agencias de noticias que proveen de información a los medios de Estados Unidos de Norteamérica sobre nuestro país, sobre nuestra Presidenta y sobre la región, levantan las notas que publican aquí los diarios Clarín y La Nación, diarios que como sabemos, han entablado una guerra de trincheras simbólica y comunicacional con el Gobierno argentino. A su vez, y por el tenor y el dato duro de las preguntas escuchadas luego de la exposición de la Presidenta, es plausible inferir que aquellos mismos asistentes a las clases se informan a través de aquellos medios que en su país toman como información lo provisto por las agencias de noticias las cuales se nutren de la lectura de Clarín y La Nación. (Breve digresión: he ahí el contundente poder de lobby de estas corporaciones económicas con anclaje en la comunicación) 

Es una hipótesis que se puede contratar, entonces, y no es de presumidos sostenerla, como indica Pagni, si además sumamos a estos datos el relato que ofrece sobre nuestro país y la región suramericana, la cadena de noticias CNN.

Pero Pagni continúa y afirma que el experimento de la Presidenta fue negativo ya que "no hubo consultas sino cuestionamientos". ¿Y cuáles fueron esos cuestionamientos? Tópicos ofrecidos por el periodismo vernáculo: La renuencia presidencial a brindar conferencias de prensa y el cuestionamiento a los datos sobre inflación y estadísticas elaborados por el INDEC. Sumado a esto, las relaciones políticas y económicas que Cristina Fernández tiene, y defiende, con el Presidente de Venezuela, Hugo Chávez. A ciertos sectores sociales políticamente informados de los Estados Unidos - como lo sabemos, como lo hemos visto - el avance regional de lo que consideran populismos autoritarios, les preocupa. Como a Pagni. ¿Y qué les preocupa? Bueno, la consolidación - y en esto el triunfo de Chávez en la próximas elecciones es crucial - de un potente bloque político, económico y cultural conformado por Brasil, Venezuela y Argentina. Y esa consolidación implica también el afianzamiento de políticas que se orienten hacia una mayor intervención Estatal sobre la economía y el mercado, a lograr mayores niveles de inclusión social, desarrollo y crecimiento económico. En síntesis, lo contrario al paradigma político y económico que Pagni y los economistas ortodoxos de derecha como Melconián o Broda, imaginan como modelo para el país y la región.

El columnista de La Nación afirma, en otro párrafo de su nota, que "las preguntas no ayudaron al éxito, pero las respuestas lo alejaron más. Cristina Kirchner hizo una demostración práctica de que no está en condiciones de aceptar conferencias de prensa. Cuando las respuestas no fueron chicanas o coartadas, desnudaron su gran desconocimiento de los temas" Y entonces, vuelvo otra vez a Joe Goldman: "Argentina ha ganado espacios diplomáticos y mucho terreno en los últimos años" para luego agregar que el Gobierno de Cristina Fernández "ha tenido logros y podría contestar cualquier pregunta", además de afirmar que la Presidenta, por estas mismas razones, podría dar conferencias de prensa en el país. Este cronista tiene una posición tomada en relación al tema: Nada importante a nivel informativo se obtiene de las conferencias de prensa, y menos en el clima actual de enfrentamiento. Pero las formas y protocolos indican que esa es la forma en que la Presidenta se comunica con los periodistas acreditados en Casa de Gobierno, y tal vez, no estaría mal ofrecerlas. La Presidenta, aun en un clima sumamente hostil, arriesga este escriba, tiene resto argumentativo, técnico y político para responder cualquier pregunta, aun las chicaneras. Es más, creo que le sumaría unos tantos (en jerga de truco).

En otra parte de la nota, Pagni asevera que el Gobierno ofrece una resistencia a abrirse a la prensa, y le adjudica a la Presidenta la siguiente tesis: en la Argentina no son las autoridades las que se enfadan con las preguntas, sino los periodistas los que se muestran intolerantes con las respuestas. Y sí, claro, es así, y basta leer todos los días los titulares de los medios con posición hegemónica para observar la tergiversación de los datos dados por el Gobierno - y soy generoso, por no llamar a ese ejercicio para nada deontológico, malicia y mendacidad. Vale como muestra, para afirmar que esa irritación es real, recordar la furibunda reacción del periodista de La Nación, Mariano Obarrio, quien durante una conferencia de prensa se ofusco con el Ministro del Interior, Florencio Randazzo, por un comentario acerca del titular de una nota publicada en el diario y con su firma, en lugar de enojarse con el editor que le cambió el título. Obarrio se retiró a los gritos y pateando puertas.

Las afirmaciones de Pagni sobre el estallido de la economía como hecho ya acontecido y como consecuencia del 25 por ciento de inflación y el "corralito cambiario" - es sagaz Pagni para elegir sintagmas que contienen un alto impacto simbólico y que remiten directamente al peor momento social y económico vivido en el país - constituyen ya elementos clásicos del arsenal lingüístico desplegado por una derecha deseosa de volver a los años en que se implementaban recetas impartidas desde el FMI y el Banco Mundial. Para Pagni, el ahorro en dólares está vinculado estrictamente a la inflación y no a una matriz cultural signada por fuertes devaluaciones sufridas por nuestra sociedad desde 1975 y hasta el 2001, devaluaciones que han dejado huellas, marcas, heridas en el cuerpo social de la republica, devaluaciones devenidas de procesos de libre flotación del dólar, inundación de divisa norteamericana, apreciación del peso o la moneda nacional y destrucción de la industria, la producción y el trabajo. Basta observar las medidas que ha tomado recientemente Brasil para administrar el tipo de cambio y proteger a su economía. 

Nada dice Pagni de los espacios diplomáticos que la Argentina ha logrado en los últimos años; "mucho terreno ganado" como manifestó Goldman.

Pero otra vez, Pagni, trata de instalar analogías del terror. Y lo hace ya desde hace tiempo y junto a el periodismo y la intelectualidad "republicana e independiente". Desliza Pagni la peligrosa homologación del Gobierno Nacional con el Nazismo. Donde Pagni dice que las raíces del nazismo no hay que buscarlas en la compleja perversión nacionalista que contaminó la cultura alemana sino en las asfixiantes condiciones que el Tratado de Versalles impuso a Berlín, puede leerse que en la Argentina, desde la irrupción del Kirchnerismo, y aún peor, desde la aparición del hecho maldito del país burgués, El Peronismo, una ola turbia de nacionalismo populista ha tomado por asalto la tradición, el corpus paradigmático que organizó política, social y económicamente al país bajo el ideario de la Generación del 80 y la Matriz Sarmientino-Mitrista de la República blanca, occidental y civilizada. Ya no es el enemigo rojo el que representa una amenaza para la República. Hoy es el nazismo disfrazado con los ropajes de los populismos nacionales y populares. Y esta es otra de las aristas de la batalla cultural: Pagni, y la derecha inorgánica, sienten que el Kirchnerismo es contaminante para nuestra cultura, y origen de la tiranía que vuelve a azotar nuestras tierras, como lo fue el nazismo para la sociedad alemana. Y así es como se reafirma, se refuerza, la idea atizada desde los mass-media, y adoptada por ciertos sectores de las capas medias, de que en la Argentina impera una tiranía (la tercer tiranía) o lo que la vulgata cacerolera llama dictadura K. Nada de ingenuidad o inocencia en Pagni; nada de artículos para ser leídos y olvidados. Y por ello mismo, nada de espontaneidad en los cacerolazos (aquí y en EE:UU) y mucho del discurso del terror criminal de la muerte en las convocatorias a escraches a funcionarios del Gobierno. Y esto, ya lo sabemos. Y pagni lo sabe.


* Periodista. Dtor. de La Tecl@ Eñe - revista de Cultura y Política www.lateclaene.blogspot.com

27 septiembre 2012

La violación de los diques democráticos/Ultimas observaciones sobre la condescendencia


La violación de los diques democráticos/Ultimas observaciones sobre la condescendencia

Por Conrado Yasenza*

Ya no voy a debatir ni polemizar más sobre la preminencia en la organización y en la manifestación misma de los cacerolazos del Jueves 13 de Septiembre (y del que se está gestando para los próximos días) de lo que se ha denominado en muchos de los artículos que se han escrito en estos días – incluyendo un par de mi autoría – clases medias altas-medias. Sólo haré una última intervención. Un grave hecho ocurrió el jueves pasado: Se quebraron  algunos diques democráticos de igualación, de ampliación, de concordancia. En la marcha de los “indignados” (Indignados! los que manifestaron por consignas-frase que no voy a repetir, y no por la pobreza del hambre, que es la pobreza de los niños nacidos bajo la sombra de la muerte, criados en la humillación y el olvido de la segunda década infame, los noventa menemistas) se expresó claramente, y quien quiera abrir los ojos y ver, verá, que la idea de igualdad que se profesa es aquella que no afecte ni siquiera de modo tibio, reformista, a ciertos privilegios de clase. Si, amigos, y no tanto, aunque les suene extemporáneo, talibán o lo que deseen, intereses de clase. No hay otra definición para lo que dijo esa “clase media” el jueves pasado y lo que se apresta a decir. Allí hubo odio, en mayor o menor grado, hubo deseos de muerte, ansias del crimen que se ha decidido aceptar, a pesar de todas las condenas escritas y escuchadas. Y con el odio y el crimen no hay posibilidad de concordancias, no hay consensos republicanistas que valgan. Y hay que decirlo de una vez: Es inadmisible dale cierta legitimidad a aquello que está ligado al odio y a las cercanías periféricas de la muerte y el crimen. Hemos atravesado la más horrible de las dictaduras vividas en el país como para aceptar “arreglos” con quienes han violado ese límite. El arreglo, la concordancia, la amabilidad, la legitimación de esa violación destruye toda la lucha realizada durante años por el respeto y la vigencia de los Derechos Humanos. No he escuchado, en todos estos días, severas condenas a todo lo dicho y gritado en esa marcha organizada desde los sectores sociales que se hayan huérfanos de representación política. Tampoco lo he escuchado en la oposición política – y esta denominación ya es un halago. Alejandro Kaufman lo expresó con claridad y contundencia: “No hay absurdo mayor que la atribución de legitimidad a lo que es inseparable del odio y el crimen. Es como si dijéramos del violador: su demanda de goce es legítima y atendible si la separamos de la violación.” Y esto constituye un error de magnitud: “No hay sectores sociales que quieran volver atrás con eso, no tendría sentido alguno el “Nunca más”, que es necesario porque existe – es plausible, objeto de deseo - el propósito de volver atrás con todo” Y no puede haber condescendencia alguna con las profundas manifestaciones de odio realizadas abiertamente el jueves pasado. Tampoco puede haber condescendencia alguna con las complicidades timoratas que rondaron esa marcha. Toda la labor, la lucha, el esfuerzo, las víctimas, los torturados y asesinados en los campos de concentración clandestinos de la dictadura cívico-militar, todo el trabajo laborioso realizado desde las organizaciones de Derechos Humanos se esfuma rápidamente con la convalidación de legitimidad y la condescendencia hacia esta violación.
No es torpeza, cerrazón o cierta miopía política el enfrentar y reaccionar antagónicamente ante la acción de potencia destituyente y odiante desplegada por esas clases medias altas y medias en la marcha de las cacerolas, que no se detendrá. El kirchnerismo desarrolló experiencias formidables de ampliación del registro de la frontera política: El Bicentenario y Tecnópolis. A menos de un año de Gobierno de Cristina Fernández la respuesta fue la invocación del odio y la muerte, la usurpación del delicado y claro concepto de Dictadura – eso es una violación. ¿Justifican tal violación el cepo al dólar, los serios problemas de transporte, las dificultades económicas ocurridas en el peor trimestre de la economía argentina en nueve años, y como consecuencia de la descomunal crisis del capitalismo financiero internacional, la inseguridad (que nunca fue negada y que es un fenómeno inherente a todas la grandes urbes, aquí, y en el mundo y desde hace años), incluso la inflación – que no está espiralizada y tampoco es producto de una economía planchada, sin producción ni consumo?
Nada lo justifica. No. Nada justifica no sólo el haber estado en la marcha, sino el dónde se estuvo luego y qué se dijo. Y vuelvo a Kaufman: “Es penoso que sectores progresistas pretendan convencernos de que el goce del violador es legítimo en sí mismo, aparte de la violación” Lo que dominó la escena de convencidos e indecisos levemente ofuscados con el Gobierno, y por sobre el dólar y la inseguridad, fue la demanda de No queremos que con nuestros impuestos y dineros se sostenga a vagos que están acostumbrados a recibir todo gratis desde el clientelismo político. Y esto, me pregunto, ¿no quedó claro, no se entiende?
Párrafo aparte merece el contundente golpe simbólico y real asestado hacia los movimientos de Derechos Humanos por el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, quien valoró de modo positivo el cacerolazo.

La clase media argentina tiene cien años de historia encima; posee mil cicatrices, heridas, desde Yrigoyen a Perón. Se sintió amenazada con los “cabecitas negras” en 1945; vivó a la “Revolución Libertadora” en 1955. Posteriormente, sus hijos le dieron carnadura a los procesos de lucha revolucionaria armada, fueron revisionistas, plantearon procesos de liberación nacional, de independencia económica; propusieron la lucha contra el imperialismo y en alianza con las clases obreras. Luego, la recuperación democrática con el alfonsinismo, el menemato, y el 2001, vertieron sal sobre aquellas heridas constitutivas. Esto es lo que produjo esas huellas y marcas de una compleja clase media.  
Pero nada de ello, insisto, justifica esa salida y reacción brutales del Jueves 13 de Septiembre último. Que hoy la clase media se sienta irritada y salga soliviantada por reclamos que pueden sonar justos, implica desconocer esa historia e implica, también, que esa misma clase media, compleja y contradictoria, no ha entendido nada de todo lo vivido. Sale furiosa por, como me dijo Nicolás Casullo en una oportunidad, siente que le roban, la despojan, de lo que bajo el imperio del neoliberalismo le dijeron que podía ahorrar, acumular, especular en plazos fijos. Y esta es una salida enceguecida. Y desde esta salida no existen los matices, es blanco o negro. Hay pactos con lo más siniestro de los medios de comunicación. Sigue siendo en la profundidad de su centro, de su corazón, cavallista, defensora del uno a uno; continúa ligada a esa ficción, a esa burbuja en la que vivió durante once años; rechaza los planteos nacionales, anti-imperialistas, los procesos reformistas de ampliación de derechos, y ni que hablar de los desafíos de enfrentar a los dueños del capital nacional e internacional.  Y esto revela una característica cultural, una matriz, una elección y una decisión que se manifiesta periódicamente en el “Que se vayan todos”. Siempre, a lo largo de los procesos políticos sociales ha dicho que se vayan todos y que venga un militar, un papá grande y con autoridad que ordene la Nación, esa Nación blanca y civilizada, que no pisa el césped en sus movilizaciones, que es educada, esa Nación tan bien descripta en la obra teatral “Ala de criados” de Maurico Kartum. Es evidente que hoy no cuenta con el partido militar; sí con el poder económico-financiero de las grandes corporaciones de la comunicación. De alguna manera vuelve a pedir que se vayan todos, y exalta ese rasgo cultural de desprecio hacia la política. Pero han roto esos diques de contención que hasta hace poco tiempo atrás imponían cierto pudor, o vergüenza, para reivindicar un golpe – a través de mini golpes – institucional. Esa barrera, ese límite, es la dictadura, los treinta mil desaparecidos. Y ese dique, y más allá de lecturas complacientes y condescendientes, fue violado durante la marcha de las cacerolas. En esa ceguera, en esa violación de las construcciones culturales trabajosamente elaboradas durante largos años de lucha, puede hallarse una explicación de este fragmento triste, paródico, de nuestra historia reciente. Y ante ello, no comprendo bien aun, las propuestas de condescendencia y legitimación de reclamos que ofenden, hieren, violan toda una trágica, dramática, experiencia de profundo dolor y desgarramiento nacional.
Es el kirchnerismo, es la Presidenta, quienes vienen siendo atacados diariamente, y de las formas más viles, crueles y, no se asusten, criminales. Y es el kirchnerismo el que no ha respondido con violencias de cualquier tipo. Aun así, es el kirchnerismo el que debe dar explicaciones por el descontento de un sector social que ha antepuesto la desmesura, en el mejor de los casos, como reacción a medidas que el Gobierno ha implementado. ¡Cuan leve puede ser, todavía, la Democracia, la construcción ciudadana, en nuestra querida República!


Periodista. Dtor. de la Revista La Tec@ Eñe –Cultura y Política.
www.lateclaene.blogspot.com 

Publicado en El Ortiba, Colectivo Popular de Cultura
http://www.elortiba.org/notapas1439.html